¿Qué es un portapaz?
El portapaz es un objeto litúrgico que era de uso común durante las solemnidades antes del Concilio Vaticano II para dar la paz. Es una tabla o placa con una representación figurada de diferentes escenas, como puede ser la Anunciación o Cristo Crucificado.
En el momento de dar la paz, el celebrante besaba el portapaz y, a continuación, era dado a besar a los fieles por un acólito -monaguillo o seglar-, que se lo iba pasando fila tras fila para llegar a todos.
En la sala de Santa Catalina de la Catedral de Segovia se conservan dos portapaces del siglo XVIII. Esta sala está dedicada a objetos litúrgicos utilizados durante la celebración de la misa, alguno todavía comunes, y otros, como el portapaz, que han dejado de emplearse.