Capilla de San Idelfonso
La capilla de San Ildefonso, situada, en la girola, está presidida por un retablo barroco clasicista del siglo XVIII. El relieve central representa a la Virgen María imponiendo, con ayuda de un ángel, la casulla a San Ildefonso como regalo por ser un gran defensor en sus obras de la virginidad de la Madre de Dios. El retablo fue realizado por Manuel Adeba Pacheco en madera estucada en blanco.
Las pinturas que se pueden observar en la capilla datan de mediados del siglo XVIII y, en ellas, se representan escenas del santo: san Ildefonso dialogando con san Marcos, san Ildefonso ataviado con túnica, capa y tirara triple acabada en cruz, y motivos alusivos a san Ildefonso dentro de un gran círculo decorado con motivos vegetales.
Dos vitrinas completan la capilla. En una de ellas se expone un Ecce Homo que llegó a Segovia en el año 1907 por encargo del obispo don Julián Miranda Bistuer. La talla, de la escuela catalana, es de bulto redondo y en madera policromada. Cristo aparece semidesnudo, tapado con una capa roja y maniatado, con una corona de espinas. Fue adquirido como paso para las procesiones de Semana Santa.
En la otra vitrina hay varias piezas entre las que se encuentran otro Ecce Homo -en este caso, del siglo XVIII y de autor anónimo procedente de Nápoles, que representa a Cristo sentado y semidesnudo, sujetando una caña- y una escultura de la Virgen María a modo de dolorosa. Esta data del siglo XVII, es de bulto redondo y sujeta en el pecho una espada, aludiendo a la profecía de Simeón que anuncia a la Virgen que un gran dolor atravesará su alma.
También, hay dos cruces procesionales, una de ellas conocida como «Crucifijo de Jerusalén», del siglo XVII en madera con incrustaciones en nácar. En el centro, aparece representado Cristo Crucificado. En los brazos de la cruz se ven escenas del Vía Crucis, y en la peana, se representa la Piedad alrededor de ángeles que portan elementos de la Pasión. La otra cruz es obra del platero segoviano Antonio Oquendo y data del año 1519. Los brazos son de cristal de roca.
La reja que cierra la capilla esté fechada en el siglo XVIII. Elaborada en madera, decorada con pan de oro y coronada en el centro por un bastón, un báculo doble y la palma de los mártires, dejando dos mitras a cada lateral.